Hoy os traigo algo diferente. Otra de mis pasiones, a parte de la cocina, y las cosas hechas a mano, es la lectura. Leer nos hace libres, y nunca mejor dicho en las lecturas que hoy voy a compartir con vosotros.
Muchas novelas históricas se han centrado sobre la Segunda Guerra Mundial. Diversos puntos de vista nos han dejado ver parte de la historia, un bando, otro, huidas, ataques. Pero hay historias que no se cuentan, héroes que no tienen edad, ni voz. Personas con miedos, y sueños. Los personajes de las novelas que os presento darán una visión de la guerra quizá algo distorsionada. De lo que ven, o no ven. Quizá más real de lo que nos imaginamos.
Me centraré en el más reciente de los libros que he leído, y a continuación os presentaré dos libros más del género.
Premio Pulitzer de Ficción 2015
La crítica a dicho:
«Deslumbrante y a pesar de todo optimista... el imprescindible relato de Doerr es un homenaje a la capacidad de resistencia de nuestros sueños, que nos llevan hacia la luz a través de la noche más oscura».
Entertainment Weekly
«Fantástica... avanza con el ritmo de un thriller... Doerr imagina la gracia invisible, la luz invisible, que, ocasionalmente, por sorpresa, sale a la superficie incluso en el peor de los tiempos».
San Francisco Chronicle
Entertainment Weekly
«Fantástica... avanza con el ritmo de un thriller... Doerr imagina la gracia invisible, la luz invisible, que, ocasionalmente, por sorpresa, sale a la superficie incluso en el peor de los tiempos».
San Francisco Chronicle
«Inolvidablemente hermoso».
The New York Times
The New York Times
Argumento:
Un corazón puro puede brillar aun en la noche más oscura. Y en el más terrible de los tiempos.
Marie-Laure vive con su padre en París, cerca del Museo de Historia Natural, donde él trabaja como responsable de sus mil cerraduras. Cuando, siendo muy niña, Marie-Laure se queda ciega, su padre le construye una perfecta miniatura de su barrio para que pueda memorizarla gracias al tacto y encontrar el camino a casa. A sus doce años, los nazis ocupan París y padre e hija tienen que huir a la ciudad amurallada de Saint-Malo. Con ellos se llevan la que podría ser la más preciada y peligrosa joya del museo.
En una ciudad minera de Alemania, el joven huérfano Werner crece junto a su hermana pequeña, cautivado por una rudimentaria radio que ambos encuentran. Werner se convierte en un experto en construir y reparar estos aparatos cruciales para los nuevos tiempos, un talento que no pasa desapercibido a las Juventudes Hitlerianas.
Siguiendo al ejército alemán, Werner deberá atravesar el corazón en guerra de Europa. Hasta que en la última noche antes de la liberación de Saint-Malo los caminos de Werner y Marie-Laure por fin se crucen. Y sus vidas cambien para siempre.
Opinión personal:
Sinceramente, este libro fue un flechazo. No lo buscaba, lo encontré por casualidad. Buscaba otro género, otro título. Por los altavoces del comercio anunciaban que cerrarían en cinco minutos. Tenía prisa. Giré mi cabeza y lo vi. Azul. Llamándome. Leí la contraportada, y pensé, es mío. Pocas veces me pasa.
No pretendo contar cosas del argumento, tranquilos, no hay spoilers, podéis seguir leyendo.
La luz que no puedes ver, el título es interpretable de diferentes maneras, cada lector tendrá la suya. Hay palabras que dicen mucho en poco espacio.
Marie-Laure, como habréis leído, es ciega, y es joven, muy joven. No ve la luz, literalmente, por su condición, pero además le ha tocado vivir en una época de sombras. Cuesta ver la luz cuando estas huyendo, y en guerra. Ella representa al perseguido, el que no quiere dejarse ver, al fugitivo sin crimen cometido.
Werner, un huérfano alemán, con una habilidad que le salvará la vida. Es un muchacho que sí ve, pero quedará cegado muchas veces. Él, en el bando que persigue.
El elemento clave es la radio. Un elemento que también cuenta mucho del título. Una voz, que transmiten las ondas, puede darte una luz, que es invisible a los ojos. Esperanza.
Está escrito en forma de capítulos muy cortos. Intercalando personajes, él y ella. El escritor logra atrapar al lector con este método. Cada página te sabe a poco, y quieres leer más, para saber más. Estas con los dos personajes casi al mismo tiempo, a pesar de sus distancias.
Ellos evolucionan con la historia, y tu con ellos. Los haces tuyos, los abrazas.
Es interesante entender la guerra des de sus ojos, la visión de un niño/joven, que realmente no entiende, que tiene más sueños que miedos, que tiene más esperanzas por lo que no ve, por la luz, a pesar de vivir lo que vive. Es una historia extrañamente entrañable.
No le he puesto las cinco estrellas, porque a veces se me hacía pesado que retrocedieran en el tiempo, y luego te hablaran del presente. Pero supongo que, esas regresiones te ayudan a entender a los personajes y saber porque son como son, y han llegado donde han llegado.
Sobra decir que si os gusta el género, esta novela os va a encantar. ¿La recomiendo? Si, por supuesto.
Algunos fragmentos:
<< No era más que un niño. Todos lo eran. Hasta el más grande de todos.>>
<< ¿Cómo puede ser que el cerebro, que jamás conoce una chispa de luz, construya en nuestro interior un mundo lleno de luces?>>
<< El aire es una biblioteca y registro de todas las vidas vividas, de todas las frases dichas, de todas las palabras que aún reverberan>>
Si os ha gustado este libro, si os animáis a seguir leyendo sobre la Segunda Guerra Mundial de los ojos de jovenes protagonistas, os presento dos libros que seguro que conocéis, y que han sido llevados a la gran pantalla.
El niño con el pijama de rayas, de John Boyne
La acción se narra desde el punto de vista de Bruno, el hijo de ocho años de un militar de alto rango nazi. Él y su familia se ven obligados a abandonar Berlín cuando a su padre lo destinan para trabajar en el campo de exterminio de Auschwitz. La familia acepta el cambio con resignación. Desde la ventana de su nueva habitación Bruno divisa una reja tras la cual hay personas que siempre llevan puesto un "pijama a rayas"; en realidad se trata de judíos prisioneros. Explorando los alrededores de su nuevo hogar, Bruno conoce a través de una reja a Shmuel. Shmuel le cuenta la historia de su deportación y las terribles condiciones de la vida en el campo.
En un pueblo vivía una niña que quería leer, un hombre que tocaba el acordeón y un joven judío que escribía cuentos para escapar del horror de la guerra. Al cabo de un tiempo, la niña se convirtió en una ladrona de libros que regalaba palabras. Con estas se escribió una historia hermosa y cruel que ahora ya es una novela inolvidable.
La ladrona de libros, novela narrada desde el punto de vista de la Muerte, nos presenta a Liesel Meminger, una niña que se va a vivir con una familia adoptiva, compuesta por dos miembros, Hans y Rosa Hubermann, en un pueblo cercano a Múnich (Molching), en la Alemania anterior a la Segunda Guerra Mundial. El partido de Hitler está en auge y sus seguidores son más numerosos cada día. A lo largo de toda la historia, se muestra el interés de Liesel por la literatura, al tiempo que se narra cómo deberá tomar partido y demostrar todo su valor en tiempos convulsos.
Relacionados con estos tres, y destinado a convertirse en un clásico, finalizo con un libro que aún no he leído, pero está en mi lista de próximamente: Anna y el hombre golondrina (marzo, 2016)
Un mundo en guerra.
Un peligroso viaje.
Una amistad por encima de todo.
Cracovia, 1939. Un millón de soldados en marcha y mil perros ladrando. No es lugar para crecer.
Anna tiene solo siete años el día en que los alemanes se llevan a su padre, profesor de lingüística, durante la purga de intelectuales en Polonia. Está sola cuando se encuentra con el Hombre Golondrina, un astuto embaucador, alto y extraño, con más de un as en la manga, un impostor que logra que incluso los soldados con los que se cruza solo vean lo que él quiere que vean.
El Hombre Golondrina no es el padre de Anna -ella lo sabe de sobra-, pero también sabe que, como su padre, está en peligro y que, como su padre, tiene un don para las lenguas: habla polaco, ruso, alemán, yiddish e incluso el lenguaje de los pájaros. Cuando el misterioso individuo consigue que una bella y brillante golondrina se pose en su mano para que Anna deje de llorar, la niña se queda embelesada. Y decide seguirlo adonde vaya.
A lo largo de su viaje Anna y el Hombre Golondrina esquivarán bombas y soldados e incluso harán amigos. Pero en un mundo que se ha vuelto loco todo puede constituir un peligro. Incluso el Hombre Golondrina.
Espero que os haya gustado,
¿los habéis leído?
¿me recomendáis alguno?
Si tenéis cualquier duda o sugerencia os invito a compartirla conmigo en un comentario.
¡Besos!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBrillante reseña! Has transmitido con claridad (y luz) el mensaje del libro :) por cierto, me apunto Anna y el hombre golondrina a mi lista de futuros!
ResponderEliminarPD: siguiendo la recomendación de libros tengo uno con la misma temática: la llave de Sara
Gracias por tu comentario!! Tendré en cuenta tu recomendación ;)
Eliminar